Erradicar la pobreza extrema y el hambre, primer objetivo de la ONU en primer objetivo de la ONU en este Milenio.
Mtra. Teresa López López
78, Navegar Juntos, 2aQ.X.08
La ONU, entre sus ocho objetivos de Milenio enuncia en primer lugar Erradicar la Pobreza Extrema y el Hambre, un tema que lamentablemente ha estado latente en todas las épocas; siempre han existido ricos y pobres, los que tienen y los que no y este próximo 17 de octubre se conmemora un aniversario más del Día Mundial para la Erradicación de la Pobreza, día Un tipo de pobreza que desde mi punto de vista no debería de existir, y eso nos diría que empezamos a vivir en un mundo de igualdad, en un mundo en donde todos tenemos las mismas oportunidades en cuanto a calidad de vida.
Erradicar la pobreza extrema y el hambre, sería dar a todos los seres humanos la oportunidad de vivir dignamente, tener una alimentación, un hogar, tener acceso a la educación, a servicios médicos, tener un empleo e igualdad de oportunidades y derechos para hombres y mujeres. ¿Qué podemos hacer? No sólo compadecernos de la persona que pide una ayuda, del niño o joven que limpia parabrisas. No. Estas son realidades cercanas a nosotros y si a ellos llamamos pobres. ¿Cómo debemos llamar para quienes no saben lo que es un desayuno, comida o cena? ¿Quiénes realmente mueren de hambre y enfermedad? Tristemente también hay niveles de pobreza; debemos buscar alternativas y propuestas de cambio que generen conciencia y actitudes de participación, desde el más mínimo espacio hasta llegar a los grandes dirigentes de nuestro país; comenzar por nosotros mismos y la gente que tenemos a nuestro alrededor y crear una cultura de participación ciudadana.
La pobreza en sí desencadena violencia como respuesta a la búsqueda de supervivencia.
¿Qué condena merece aquél que roba por comida? ¿Quién o quiénes son los causantes de estas respuestas que no son más que el reflejo de la desigualdad social y marginación en la que vive hoy en día?
Sin duda alguna un motor fuerte en esta batalla sería la educación, una educación que lleve a la liberación del pensamiento, a la igualdad de saberes para hombres y mujeres, para niños y adultos, una educación para todos. Este es el segundo objetivo que promulga la ONU: lograr la enseñanza primaria universal. Y hago mención de esto porque para poder reducir la pobreza es necesario hacer un cambio de cultura, crear conciencia del hambre que existe en el mundo; y esto sólo puede alcanzarse si existe educación, pero una educación ética y en valores humanistas, en términos de bien común dejando a un lado intereses personales e individualistas, tan presente en la cultura actual.
La Organización de la Naciones Unidas establece 8 Objetivos de Desarrollo del Milenio, los cuales se busca alcanzar para el año 2015:
1) Erradicar la Pobreza extrema y el hambre
2) Lograr la enseñanza primaria universal.
3) Promover la igualdad entre los géneros y la autonomía de la mujer.
4) Reducir la mortalidad infantil.
5) Mejorar la salud materna.
6) Combatir el VIH/ SIDA, el paludismo y otras enfermedades.
7) Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente y
8) Fomentar una asociación mundial para el desarrollo.
¿En cuál o cuáles estamos trabajando el día de hoy? Falta mucho por hacer y estamos a pocos años de llegar al 2015; tenemos que buscar la igualdad de derechos y oportunidades para todos, hombres y mujeres, niños y niñas de nuestro mundo, de lo contrario seguiremos conmemorando por muchos años más el Día Mundial de la Erradicación de la Pobreza Extrema y el Hambre.
Mtra. Teresa López López,
Educación de Adultos, Centro de Desarrollo Social
78, Navegar Juntos, 2aQ.X.08
La ONU, entre sus ocho objetivos de Milenio enuncia en primer lugar Erradicar la Pobreza Extrema y el Hambre, un tema que lamentablemente ha estado latente en todas las épocas; siempre han existido ricos y pobres, los que tienen y los que no y este próximo 17 de octubre se conmemora un aniversario más del Día Mundial para la Erradicación de la Pobreza, día Un tipo de pobreza que desde mi punto de vista no debería de existir, y eso nos diría que empezamos a vivir en un mundo de igualdad, en un mundo en donde todos tenemos las mismas oportunidades en cuanto a calidad de vida.
Erradicar la pobreza extrema y el hambre, sería dar a todos los seres humanos la oportunidad de vivir dignamente, tener una alimentación, un hogar, tener acceso a la educación, a servicios médicos, tener un empleo e igualdad de oportunidades y derechos para hombres y mujeres. ¿Qué podemos hacer? No sólo compadecernos de la persona que pide una ayuda, del niño o joven que limpia parabrisas. No. Estas son realidades cercanas a nosotros y si a ellos llamamos pobres. ¿Cómo debemos llamar para quienes no saben lo que es un desayuno, comida o cena? ¿Quiénes realmente mueren de hambre y enfermedad? Tristemente también hay niveles de pobreza; debemos buscar alternativas y propuestas de cambio que generen conciencia y actitudes de participación, desde el más mínimo espacio hasta llegar a los grandes dirigentes de nuestro país; comenzar por nosotros mismos y la gente que tenemos a nuestro alrededor y crear una cultura de participación ciudadana.
La pobreza en sí desencadena violencia como respuesta a la búsqueda de supervivencia.
¿Qué condena merece aquél que roba por comida? ¿Quién o quiénes son los causantes de estas respuestas que no son más que el reflejo de la desigualdad social y marginación en la que vive hoy en día?
Sin duda alguna un motor fuerte en esta batalla sería la educación, una educación que lleve a la liberación del pensamiento, a la igualdad de saberes para hombres y mujeres, para niños y adultos, una educación para todos. Este es el segundo objetivo que promulga la ONU: lograr la enseñanza primaria universal. Y hago mención de esto porque para poder reducir la pobreza es necesario hacer un cambio de cultura, crear conciencia del hambre que existe en el mundo; y esto sólo puede alcanzarse si existe educación, pero una educación ética y en valores humanistas, en términos de bien común dejando a un lado intereses personales e individualistas, tan presente en la cultura actual.
La Organización de la Naciones Unidas establece 8 Objetivos de Desarrollo del Milenio, los cuales se busca alcanzar para el año 2015:
1) Erradicar la Pobreza extrema y el hambre
2) Lograr la enseñanza primaria universal.
3) Promover la igualdad entre los géneros y la autonomía de la mujer.
4) Reducir la mortalidad infantil.
5) Mejorar la salud materna.
6) Combatir el VIH/ SIDA, el paludismo y otras enfermedades.
7) Garantizar la sostenibilidad del medio ambiente y
8) Fomentar una asociación mundial para el desarrollo.
¿En cuál o cuáles estamos trabajando el día de hoy? Falta mucho por hacer y estamos a pocos años de llegar al 2015; tenemos que buscar la igualdad de derechos y oportunidades para todos, hombres y mujeres, niños y niñas de nuestro mundo, de lo contrario seguiremos conmemorando por muchos años más el Día Mundial de la Erradicación de la Pobreza Extrema y el Hambre.
Mtra. Teresa López López,
Educación de Adultos, Centro de Desarrollo Social
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