Investigación sobre Jesús de Nazaret

Rebeka Calvo | Donostia
16 de octubre 2007
GARA

Pagola presenta a un hombre que rompía con los códigos vigentes

¿Quién fue Jesús de Nazaret? ¿Por qué su nombre no ha caído en el olvido? ¿Por qué fue ejecutado? Éstas son sólo algunas de las preguntas a las que el teólogo y sacerdote José Antonio Pagola intenta dar respuesta «científica» en su libro «Jesús. Aproximación histórica».

José Antonio Pagola ha dedicado los últimos siete años a indagar en la figura de Jesús de Nazaret y su conducta «extraña y provocativa». El resultado ha sido «Jesús. Aproximación histórica», un libro en el que se afirma que Jesús de Nazaret fue un «obrero de la construcción» con un «proyecto», el de un Dios «al que interesaba más la gente que la religión», y que cuestionó «el sistema de la pax romana». «Rompía constantemente los códigos de comportamiento vigentes en aquella sociedad», explicó el teólogo, sacerdote y actualmente director del Instituto de Teología y Pastoral de Donostia.

Pagola ha plasmado en el libro un detallado perfil de Jesús y de la sociedad en la que vivía, de manera que algunos de los datos «contrastados» con los que se puede contar hoy en día serían los siguientes: nació entre los años 6 y 4 antes de nuestra era y probablemente en Nazaret, no en Belén como se ha apuntado durante siglos; su lengua materna fue el arameo, aunque conocía también el hebreo y algo de griego, que estaba por entonces muy introducido en Palestina; no sabía latín y seguramente tampoco sabía ni leer ni escribir, por lo que «no pudo dejar nada escrito; era un hombre muy inteligente, pero gracias a la tradición oral».

Aunque en la tradición popular se da por hecho que era de profesión carpintero, en realidad era un «obrero de la construcción» que trabajaba tanto la madera como la piedra y, aunque se dice que salió de Nazaret hacia el desierto a los 30 años, lo hizo a los 16, que sería cuando asumió la nueva fe cristiana y volvió para predicarla. Su familia no entendió este cambio en Jesús y le dio la espalda: «Pensaban que estaba fuera de sí», comentó Pagola, así que abandonó su hogar y fundó una «nueva familia».

Su vida fue relativamente corta, ya que fue ejecutado cuando tenía entre 34 y 36 años. A pesar de ello, su mensaje ha perdurado con fuerza hasta nuestros días, aunque no de la forma en la que él mismo lo predicó. Y es que muchas de las cosas que se le han achacado son falsas.

Sobre uno de los dones que se le presuponen a Jesús, el de curar, Pagola sostiene que sí fue un gran curador y exorcista, pero no entendiéndolo como «milagro», sino como fruto del conocimiento.

Igualdad para las mujeres

También se ha dicho sobre Jesús que tuvo una «conducta desviada», ya que rompió con los esquemas de la época rodeándose, por una parte, de «gente indeseable» -como malhechores, prostitutas o ladrones- y, por otro, dando igual trato a los hombres y a las mujeres. «Aceptaba las mujeres en el mismo grado que a los hombres. No aceptaba de ninguna manera la dominación masculina», aclaró.

Asimismo, Jesús de Nazaret nunca dijo, según Pagola, aquello de «¡Hay que volver a Dios!», sino «Hay que buscar el reino de Dios y su justicia»; es decir, «Jesús no habla de Dios desentendido del proyecto». Tampoco asociaba, como sí lo ha hecho la Iglesia católica durante años, a Dios con el culto, «sino con una vida más dichosa para la gente. A Dios le interesa más la vida de la gente que la religión».

Pagola mantiene que el concepto de «pecado», ligado casi inevitablemente con la Iglesia católica, tampoco tiene su origen en Jesús, puesto que éste se centraba en el sufrimiento. «Ve a esa gente como enferma, no como pecadora», puntualizó.

«Lo primero y lo último que le brota es la compasión, y así lo dijo: `Sed compasivos como lo es vuestro padre en el cielo'», explicó.

No obstante, a Pagola uno de los datos que más le ha llamado la atención es el de la «no dominación» que predicaba: «Pedía un espacio sin dominación, ni masculina ni de ningún tipo. Decía que nadie podía ponerse sobre nadie, ni él puede gobernar a nadie».

Crítico con «El Código da Vinci»

Durante la presentación de su libro, este sacerdote nacido en Añorga en 1937 se mostró especialmente molesto con novelas «de ciencia ficción» como «El Código da Vinci» o «Jesús vivió y murió en Cachemira», que han obtenido gran éxito entre los lectores. «Son obras preparadas en muy pocos meses y por personas que no son investigadores. Es literatura fantástica y la presentan como histórica. Además, van en contra de la investigación, porque hacen un uso fraudulento de las fuentes, ni siquiera las nombran en la mayoría de los casos, y sólo se quedan con los episodios sensacionalistas», manifestó.

Pagola ha escrito esta obra especialmente pensando en tres grupos de personas: los cristianos, ya que «evidentemente Jesús está mal entendido entre los cristianos»; para los no creyentes, puesto que Jesús «es patrimonio de toda la humanidad»; y para los jóvenes porque, «aunque dicen que pasan, están interesados en conocer más sobre el personaje».